Vamos a darle a las legumbres el papel que se merecen. Estos humildes ingredientes, también llamados leguminosas, son un alimento increíblemente nutritivo y saludable.
1 - Son una valiosa fuente de proteínas, bajas en grasas y altas en fibras alimenticias y solubles, además de contener importantes vitaminas y minerales como calcio, potasio, zinc y antioxidantes.
2 - Las legumbres son carbohidratos de bajo índice glicémico (GI), lo que significa que se descomponen más despacio, proporcionando una duradera fuente de energía.
3 - No solo son nutritivas y saludables, sino además económicas, por lo que constituyen la base de la cocina popular en muchas tradiciones y culturas.
4 - La familia de las legumbres la forman plantas que producen una vaina con las semillas en su interior, como las lentejas, guisantes, garbanzos, judías, la soja y, por si no lo sabías, los cacahuetes.
Las legumbres pueden comprarse secas, enlatadas o congeladas. Son increíblemente versátiles y combinan con una amplia variedad de otros vegetales, por lo que pueden añadirse a muchísimos platos diferentes.
Habas: las habas son una importante fuente de vitaminas A, B1 y B2, y aportan sabor y textura a muchos deliciosos platos, como Habas guisadas a la portuguesa.
Guisantes: bajos en grasas, carbohidratos, calorías y azúcar. ¿No son adorables los pequeños guisantes? Pruébalos añadiéndolos a un maravilloso plato de risotto.
Lentejas: vienen en numerosas formas y tamaños; las hay rojas, marrones y negras, entre otras variedades. Unos crujientes Falafel de lentejas rojas y coliflor son una estupenda cena, y una valiosa fuente de proteínas vegetales.
Garbanzos: altos en fibras y en folato y bajos en calorías, los garbanzos son un ingrediente importante de los guisos, sopas, ensaladas, e incluso puedes preparar con ellos pan de molde.
Judías rojas o frijoles: el ingrediente principal de un buen plato de chile, las judías rojas ayudan a reducir los niveles de glucosa en sangre después de la comida.